SPRINGER NANCY
Para Enola, aparte de su hermano Sherlock, con quien discute amenudo, la señora Tupper, su casera, es lo más parecido a su familia.Pese a estar medio sorda y cocinar espantosamente, llena la ausenciade su madre desaparecida. Un día, Enola regresa a casa y descubre,horrorizada, que la han secuestrado. ¿Quién ha podido hacerlo?, ¿y por qué? ¿Y qué tiene que ver en todo el asunto la enfermera FlorenceNightingale?Aparta, Sherlock, ¡ha llegado Enola!