CRUZ SÁNCHEZ DE LARA
"José de Ribas demostró siendo muy niño que había heredado de su padre, el capitán y noble catalán destinado en el reino de Nápoles, Miguel de Ribas y Boyons, el don innato para el urbanismo y la ingeniería, además de ciertas dotes para la seducción y la diplomacia. Ya convertido José en mayor del ejército napolitano, se embarcó en un viaje que lo llevaría por las cortes europeas y del que no regresaría, pues el destino le tenía reservados grandes logros en la flamante corte de Catalina II de Rusia, la Grande.